
Lo peor de todo no fue haber visto el partido acá en Brasil, rodeado de brasileros, recibiendo las llamadas de muchos otros amigos brasileros a cada gol -convertido por uno de ellos o por unos de los nuestros en nuestro arco, da lo mismo-.
Lo peor de todo fue que un amigo argentino me escribió en el MSN: "Si le querés ganar a Brasil, hacete de Boca".
No hay comentarios.:
Publicar un comentario